agosto 25, 2003

Parece que vuelvo al ritmo del descanso y sosiego, absorto en mis libros y temas fundamentales (ELLA), es que el fin de semana fue digamos algo relajante pero terminé frustrado porque tenía ganas de hacer algo más instructivo, más que hacer nada.

Una cosa que me emputa, así lo digo, es que la gente se pasa de conchuda, el sábado llegando a mi casa, veo con estupecfacción, (con cara de won), que un par de tipos estaban chupando prácticamente en la puerta de mi casa, jugando puntería con sus pollos sucede que hay una tienda al costado y cada sábado es uno más en la demostración de estupidez humana, lamentablemente con gente de mi mismo sexo, (si fueran chicas, las invitaría a mi casa), pensé 1. Decirle su reparimpanhijueputaymísera vida, que se mueva de mi casa y se ponga a matar sus neuronas a otro lado. 2. Salir a 'regar' la acera de mi casa (es la clásica, no te peleas con nadie y todos felices) 3. o me quedo callado y como si las webas, total, mi abuela limpia en la mñana. Luego de gritar a mi casa a los 4 vientos que habían pendejos afuera, (para lo que nadie me hizo caso), me las agarré con la chica de la tienda, con ella no puedo ser malcriado y le dije de lo más tranquilo (mentira, casi me la como con todo y zapatuchos), que los mueva porque conmigo se armaba el tole tole, así que ella muy consciente de la situación (se habrá dado cuenta que la calateaba con la mirada), llamó a los angelitos y los movió para su lado, yo feliz, envalentonado y orgulloso de haber movido a esos tarados, triunfo ...ajo ...are ...erda.

Tenía que decirlo, era menester, terminé feliz el fin de semana con un paseíto por el Jockey Plaza, a pesar que no fui fashion disfruté con los calzones presentes, es la única y exclusiva razón por la que me como 1 hora de viaje desde mi casa, ah!!!! ahora me acuerdo, tengo un cierto trauma con esos aparatos que detectan si te has llevado algo, pero mejor lo escribiré luego, demasiado por hoy.

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