Sostienen mis manos mi propio cuerpo y no lo dejan caer, una mirada esquiva lo lanza al abismo, hay una realidad sumamente extraña y mis latidos se sienten, certezas, certezas, certezas... un futuro resuelto, el camino sigue por donde está la flecha, pase usted señor, sólo tengo que entrar y no mirar atrás y mi alma está feliz, pero triste no llora; mis ojos están felices, pero tristes no lloran; mi corazón está feliz pero triste no llora, quiero volver.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario